No soy de celebrar en días señalados en el calendario. Soy más del
cada día porque todos los días cuentan para agradecer, para regalar… he sido
muy afortunada junto con mis hermanas de haber tenido dos madres. Una
maravillosa y la otra igual de maravillosa porque de alguien grande no puede
venir alguien pequeño. Acabamos de perder a una de ellas y nos sentimos muy
desoladas aunque al mismo tiempo agradecidas con la vida que quiso que la
tuviéramos a nuestro lado hasta sus 93 años.
Hay amores y amores. Este amor era enorme y mutuo de todos hacia ella
y de ella hacia todos.
Hay personas que alrededor de ellas siempre hay un ambiente de paz.
Son seres que necesitas cerca por la
forma en que te hacen sentir. Mi abuela era una mujer entrañable. Mi madre y
ella hacían un equipo precioso de crianza. Cada una con sus normas, cada una
con su papel de vida… contradictorias a veces, equipo otras, remaron juntas
muchos años.
Hemos sentido su pérdida los cinco como la de una MADRE. Porque como
en alguna ocasión he dicho madre no es solo la persona que da la vida al
comienzo, sino que ser madre es algo muchísimo más que eso. Una madre se fragua
en la lucha de la crianza, porque criar es una lucha a veces divertida y otras
sin ninguna gracia. Criar es cuestión de años, de una vida entera y cuando
alguien te dedica su vida no puedes más que agradecerlo y devolverle un poco
todo eso.
Estos últimos cuatro meses han sido complicados porque poquito a poco
hemos visto como se despedía de la vida aquí.
Sentimos un profundo agradecimiento a todas las personas que a nuestro
lado nos han ayudado a hacerle sus últimos días más llevaderos. A dos vecinas
de mi madre y a sus hijas que en los momentos difíciles se convierten en
familia. A mis tías que han estado cerca para apoyarnos. A una prima que
queremos como una hermana que ha estado también para nosotros en todo momento. A
las personas que trabajan en el ayuntamiento de Moya de ayuda a domicilio que
hacían un trabajo maravilloso de respeto, amor y dedicación con ella. A Marta que en un mes nos
demostró que ser persona y ser humana no es una cuestión de tiempo ni de
sangre. A mis padres por darnos de nuevo la mejor lección de todas, la del
agradecimiento, la del dar todo para que la vida te lo devuelva multiplicado
por mil. A mis hermanas y a mi hija porque las cuatro formamos un equipo diez
de cuidados para ella. Menuda piña formamos. A mi pareja que siempre respetó
que me necesitaba y que yo quisiera estar ahí para ella. A la vida, por
dejar que la disfrutarámos tantísimo
tiempo y a ella por supuesto a ella, que ha sido nuestra abuela, nuestra madre
y al final nuestra hija …
Si es cierto que hay un cielo para los buenos, para los que dan sólo
cosas buenas, a ti te han abierto la puerta y la han cerrado rápido para que no
te escapes. Nos has dejado un vacío muy grande en casa y en nuestro corazón
pero tenemos tu precioso recuerdo, lleno de momentos inolvidables a tu lado.
Y a ustedes decirles que cuiden de sus MADRES, porque son seres mágicos…
Feliz día MAMÁS, a todas las que están en otra dimensión y a las que
están en ésta …
RO
Lo siento mucho Ro. Debió de ser alguien grande porque, como dices tu, y yo le doy la vuelta: "alguien grande como tu no puede vernir de alguien pequeño". Un abrazo fuerte
ResponderEliminarMuchas gracias Rebe ... besitosss
ResponderEliminarque lindas palabras Ro
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